SALA DE REDACCIÓN – El Sector Tiburón del Barrio Espinosa en el municipio de Dorado, pasa serias necesidades ante la falta constante del servicio de agua potable de la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados, situación que lleva ocurriendo 30 años.
Esto ocurre específicamente en la Carretera PR-679, kilómetro 0.7, alrededor de unas siete casas sufren de bajas presiones y la falta del servicio.
Un residente del sector nos expresó, “Se han hecho querellas en acueductos durante años, las cuales cierran diciendo que está todo bien, cosa que no es así, durante años hemos estado haciendo querellas en Ombudsman, al principio funcionaba pero por cuestión de una semana, cerraban la querella y volvía el problema, hemos estado semanas largas con un chorrito o sin agua en esta comunidad llena de personas mayores que no tienen por que estar pasando estos trabajos a esta edad de su vida”.
Los residentes expresan que han llevado el reclamo al acalde de Dorado, el Hon. Carlos López, y este le dio conocimiendo directamente a la presidenta de la AAA, la Sra. Doriel Pagán Crespo, sin embargo, siguen pasando los meses y nada ha ocurrido.
Durante el mes de mayo del presente año, un empleado de AAA visitó la comunidad y expresó que era “injusto” por lo que estaban pasando y la situación se resolvió, pero solo duró cuatro días el servicio de agua.
“Un empleado de AAA que visitó el lugar nos indicó que al supervisor de esa zona, le molesta atender este tipo de querellas de bajas presiones o falta de servicio.
En junio nos llama la señora Ruiz del area de reclamaciones de AAA y nos pregunta por la situación, le decimos lo que sucede, nos dice que el director de Toa Alta pasaría por el área antes que cerrara el año fiscal para ver que había que invertir, pero aún seguimos esperando y dicha querella la cerraron”, expresó el residente bajo el nombre de Eduardo Ortiz.
Según nos expresan, este problema comenzó para el año 1989, cuando la AAA contruyó unas nuevas facilidades para poner una bomba para darle agua a la comunidad Marzán del municipio de Toa Alta y parte de la comunidad Maricao de Vega Alta. “Cuando se va la luz en esa bomba, nosotros tenemos agua”, expresó el Sr. Ortiz, residente del lugar, quién está cansado de realizar tantas gestiones con las agencias del gobierno sin obtener frutos.
Este también nos comentó que en su residencia hay una persona de edad avanzada, quién a sus 83 años, acaba de sufrir un infarto, además de que en la comunidad hay personas encamadas y no es justo que estén atravesando por esta situación.
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